El título no es el más adecuado, pues no son mis animales, no me pertenecen, como así tampoco nos pertenecen las personas.
Mi hija.. sí, es mi hija, pero no me pertenece pues, no es un objeto con el que hago lo que me venga en gana, no es un libro ni un par de zapatos, es un ser querido al que amo y, por lo tanto debo, deseo proporcionarle todo lo que esté en mis manos para hacerle feliz.
Los animales, son seres vivos como nosotros, que merecen el mismo trato.
Se podrían escribir páginas y páginas sobre éste tema. Son muchas las personas que no piensan como yo, pero yo a éstas les diría... "¿os habéis puesto en el lugar del animal alguna vez..?" no es tan difícil pensar que una perrera, es como para nosotros, una cárcel. ¿A quién le gustaría ir a la cárcel? Allí te dan de comer, tienes un techo para la lluvia y de vez en cuando sales al patio...pero yo no sería feliz allí, aunque haya gente que viva mucho peor que los presos.
¿Y los animales de granja..? Sí, vale, somos depredadores pero por eso no tenemos que ser maltratadores. Podemos criar a nuestros animales felizmente en granjas adecuadas, hasta que les llegue su hora. Después, una muerte sin dolor, sin estrés, sin sufrimiento. Los mataderos ya están mejorando por suerte, aunque hay muchos aún que parecen más bien, campos de concentración nazis.
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